Descubriendo Sri Lanka, la vieja Ceilán
Sri Lanka, antiguamente conocida como Ceilán, es una isla, al este de India y su capital es Colombo. En el 2009 se terminó una guerra civil que sacudió al país durante 30 años y que alejó al turismo. Por este motivo, no sabía bien que esperar de este destino, pero después de 20 días recorriendo afirmó que es simplemente un lugar fascinante para visitar, por estas razones:
El balance justo entre cultura y actividades al aire libre
El país tiene, en sus 432 km de ancho y 224 km de largo, cerros, valles, cataratas, lagos, plantaciones de té y playas atractivas. De esta rica variedad surgen actividades diversas como snorkel, buceo, surf, safari y hiking. A su vez, la presencia de estatutas de Buda gigantes y templos en la mayoría de los pueblos hacen que hayan visitas culturales obligadas. Kandy, por ejemplo, es una ciudad sagrada para los budistas que fue declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO en 1988.
Tuk Tuk
Son famosos en India y en varios países del Sudeste, pero simplemente los Tuk Tuk, triciclo a motor que se usa como principal medio de transporte, le dan un toque pintoresco a las ciudades. Hay Tuk-tuks por todos lados, verdes, rojos, negros adornados con figuritas de Bob Marley, jugadores de fútbol, collares y cualquier tipo de accesorio que contribuya a reflejar la personalidad del conductor. Ya sea una excursión, un viaje corto dentro de una ciudad o un viaje de un rincón del país al otro, subirse a un tuk-tuk es una experiencia simpática para sumergirse en la vida local.
Los srilankeses
Sacuden la cabeza para el costado como diciendo “no”, pero significa sí. Es tremendamente confuso. Por unos segundos, uno se queda mirandolos tratando de descifrar si entendieron querés una coca o si hay que pedirla de nuevo. Al rato, con una sonrisa te dan tu bebida. Son amigables, atentos y respetuosos. Valoran al extranjero y se esfuerzan por dar el mejor servicio.
Estudios ayurvédicos
Historia, creencia y hábitos. “Si no podes ser rey, sé sanador, dice un famoso refrán srilankés. Hace más de 3,000 años que el uso de hierbas y especias es una práctica tradicional en estas tierras. Citronela, vainilla, aloe vera, clavo de olor, canela son algunas de los tantos aromas que uno puede disfrutar visitando los centros medicinales y a su vez, aprender sobre la creación de aceites, cremas y remedios naturales.
Tren de Ella a Kandy o viceversa
Sencillamente fantástico, escénico. Está considerado como uno de los mejores viajes en tren de todo Asia. Este recorrido de 7 horas no solo ofrece un paisaje alucinante sino que permite relacionarse con los locales y aprender más sobre su forma de vida.